Por: Stibaliz RuizUrquijo
11 de enero del 2021
La situación ya nos ha rebasado, todo está fuera de control, y ¿sabes porque?, por nuestra irresponsabilidad, no llego a comprender como existe tanta gente que le vale un cacahuate lo que nos está pasando, quisiera saber ¿Qué paso por la cabeza del organizador del rave en Santiago? ¿Qué pensó? Pensó que todos los que fueran estaban “seguros” o ¿que decía en la invitación? “ESPACIO LIBRE DE COVID”, no puedo creerlo.
Me apanica leer las noticias o escucharlas, “Estamos al tope” “Estamos rebasados” “No salgas” y ¿Qué pasa? Medio mundo en la calle, yo tengo que salir a trabajar y soy la elegida para ir a las compras necesarias… y me preocupa tantísimo, ver gente en el supermercado “dando la vuelta” porque me ha pasado que veo a una persona que literal anda de paseo en el super y lo vuelvo a ver en la caja y está pagando x cosa, ¡no fue a nada!
Vuelvo a lo mismo, si no nos cuidamos nosotros ¿quién esperas a que lo haga?, lo que si me queda claro es que tenemos una responsabilidad social, con mucha gente de nuestro alrededor, pensaba; ¿alguien está cuidando a los muchachos que recolectan la basura?, es una obligación nuestra, que si tenemos un enfermo de Covid en casa, hacérselos saber, para que tomen sus precauciones, o poner una bolsa roja o que se yo, hay manera de ayudar de cuidar, las señoras domésticas, también es nuestra obligación de que si en casa hay un sospechoso, avisarle, porque en automático ella lo es también, es una responsabilidad que tenemos como seres humanos ¡PENSANTES!
Leía hace un momento que ahora aparte de cuidarnos de no contagiarnos, también tenemos que cuidar más de nosotros, en el aspecto de tener un accidente, en casa, en la calle, en la oficina… si nos dicen que la ocupación hospitalaria esta al tope, como porque nosotros por algún descuido les vamos a ir a dar más trabajo a nuestros médicos y a todo el equipo de un hospital, si están agotados física y mentalmente. Como para que llegue uno de inoportuno. Aparte de que corres un riesgo altísimo de ser contagiado por arreglarte una cosa, sales con otra.
Es hora de ponernos pilas (bueno en realidad, esto debió haber pasado hace mucho tiempo) pero, ok, ponte las pilas, quédate en casa, si no tienes a nada que salir, por favor no salgas, si tienes la oportunidad de pedir tu despensa en línea, hazlo, si un vecino vende fruta, verdura, granos, comprémosle a él. Si tienes tiendita en la esquina de tu casa, pide por teléfono, si no, llega a esa tienda, con tu tapabocas, agarra lo que vas a comprar y salte, te ayudas tú y los ayudas a ellos a que no pierdan su fuente de ingresos.
Los niños, ese es un tema muy importante, tenemos que redoblar nuestros esfuerzos con ellos, tendremos que trabajar en su psicología en la cuestión de sus relaciones interpersonales, no las tienen, el no ir a la escuela, no ir a la natación, no ir a asesorías de matemáticas, todo por video-llamada, vamos a tener muchísimo trabajo con ellos, cuando puedan volver a salir, no será, no es una tarea fácil. Creo que ahora que vuelven a “entrar” a la escuela lo van a agarrar con más calma, pero aquí el tema es su corta vida social, que es cuando comienzan a desarrollarse para forjar su carácter, sus aficiones, donde ellos se definen… el tema es largo, lo discutiremos la próxima semana.
Por favor, ayudemos a bajar las cifras alarmantes que tenemos en este momento. Todo esto que está pasando es el rebote de las fiestas decembrinas, muchos la pasamos en casa con 4 – 5 personas y fue una noche especial, porque muchos tuvieron una silla vacía, otros brindaron por seguir juntos y completos. Yo quiero seguir brindando porque estamos completos, pero el trabajo no es de las autoridades, es de nosotros. Y la verdad no nos cuesta nada, aguantar las ganas de salir. Como dicen “hay más tiempo que vida…”
ruiz.urquijoopinion@gmail.com