El Senador de la República por Nuevo León Samuel García recibió una sorpresa nada grata esta mañana en el municipio de Cadereyta.
Y es que cuando pretendía realizar una visita a la refinería de Pemex para realizar una «clausura simbolica» por la contaminación que emite y afecta al área metropolitana de Monterrey, empleados salieron a protestar.
Con pancartas de rechazo y consignas en contra del político de Movimiento Ciudadano fue recibido, efecto contrario al que esperaba pues pensó que tal vez obtendría algún reconocimiento de la población al hacer este acto mediático.