Las esperanzas por encontrar vivo a su hijo, desaparecido desde abril del presente año, se disiparon este fin de semana.
Y es que Enedina reportó la desaparición de su hijo Víctor Hugo González Mungarro de 35 años de edad el pasado 1 de abril, desde entonces no tenía noticias de él.
Lo último que supo es que llevaría a reparar un teléfono celular y quedó de verse con unas personas y jamás regresó.
Doña Enedina reconoce que su hijo tenía problemas de adicción por lo que supone que alguien relacionado con ese medio ambiente tuvo que ver con su desaparición.
Tras hacer el reporte a la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora y no obtener la respuesta esperada, Doña Enedina se unió al colectivo denominado “Buscadoras del Paz”.
Cinco meses después, apoyada por este colectivo, el pasado 14 de septiembre lograron dar con el cuerpo de su hijo, se encontraba enterrado en un pasillo de una casa ubicada en la colonia San Bosco, en Hermosillo Sonora.
Doña Enedina logró identificarlo por los tenis que aún portaban los restos óseos que ahí encontraron.
Aunque de inmediato dieron aviso a las autoridades, no fue sino hasta el día siguiente cuando acudieron con la orden de cateo para hacer el levantamiento de la escena del crimen y recuperar la osamenta.
Las pruebas de ADN continúan su proceso para confirmar la identidad de los restos encontrados.
